El fútbol colombiano vive un momento brillante. La selección Colombia juega hoy su partido de semifinales frente a Chile. Nuestros muchachos llegaron a esta instancia de la Copa América Centenario gracias a una combinación maravillosa de juventud, experiencia, profesionalismo y entrega.
Presenciamos un seleccionado, que pese a su juventud, –la mayoría de jugadores no sobrepasa los treinta años– ha logrado una madurez y una experiencia a través de un trabajo serio y comprometido con los objetivos, entendiendo que los procesos tienen su tiempo y que hay que aplicar las tácticas y las estrategias adecuadas.
Esa filosofía que se expresa en la cancha es la que nos hace saltar de nuestros asientos frente a los millones de televisores que transmiten los encuentros desde los Estados Unidos.
Es el fútbol que une a los colombianos, nos llena de alegría y nos inspira a seguir luchando por conquistar nuestras metas. Es el fútbol que inspira a nuestros estudiantes barranquilleros de que sí se puede cuando el trabajo se hace con responsabilidad, pasión, compromiso y entrega.
Esperamos, por su puesto, que hoy nuestra selección pase a la final. Pero independientemente del resultado estamos seguros de que los muchachos lo dejarán todo en el campo de juego y que los demás colombianos no seremos simples espectadores, sino unos hinchas que no decaen en el empeño de acompañar a la selección. Y si el resultado no es el anhelado, no dejaremos que nuestro ánimo decaiga ni daremos espacio para la crítica que no construye.
Así como nuestra Selección siempre va pa´lante, mis estudiantes barranquilleros siguen en su empeño de conquistar sus sueños: ser los mejores estudiantes de Colombia y convertirse en unos cuantos años en los profesionales que requiere el país, conscientes de que la formación es la base para un desempeño superior.
Y ayudarlos en el logro de esos objetivos es la labor que nos compromete desde la Secretaría de Educación de Barranquilla. Cada programa, cada ayuda, cada actividad, cada peso invertido en los colegios del Distrito están enfocados a que nuestros niños y jóvenes logren sus sueños.
Y así como la mayoría de nuestros jugadores de la selección se desempeña en las ligas más exigentes del fútbol internacional, nuestros estudiantes barranquilleros serán los profesionales idóneos del mañana.
